Mi querida Helena...carta nº 52.

Mi queria helena………carta nº 52.

Por fin llegó el miércoles tan esperado, como explicarte los preparativos. Saque toda la ropa del armario, me la probaba una y otra vez, tardé una hora en maquillarme como yo queria, en fin un desastre. Me decidí por un traje de seda rojo para darme ánimos, y la verdad es que el resultado no quedó mal. A las 6,30 yo ya estaba en San Isidro dando vueltas hasta que se hiciera la hora para entrar así estaba de nerviosa.

Por fin dieron las siete y entré al teatro (como hacen siempre los argentinos, ) comenzaron a llegar a las 7, 10,7,25 y yo en el hall como un pasmarote.

Cuando empezaban a llegar me di cuenta que mi ropa era un desastre, todos iban con jeans, camisetas, faldas largas con el ombligo al aire…me queria morir, allí iba llegando gente con una media de edad de 25 años, solo llegó un hombre de mi edad, eso si guapísimo , acabó siempre de galán conmigo los tres años que estuvimos allí.(hoy es conductor de un programa de radio), Por fin llegó Ines y todos entramos en aquel recinto sagrado para mí..

Inés nos dijo una palabras de cómo iba a ser el curso y acto seguido nos hizo subir al escenario, una vez allí, sacó una cuerda y dijo que nos la pasaramos por el cuello y sacarla por la cintura para dársela después a compañero de al lado….Yo tenia un miedo horroroso, lo primero que pense cuando vi la cuerda es Dios mio levantarme la camiseta haria que mi “delantera”, ya muy voluminosa pudiera notarse en algún momento, y me dije si esto va de desinhibirme tendrá que irme de aquí..Cuando llegó el cabo de la cuerda a mi posición tragué aire y la metí temblando de pies a cabeza pensando que seria lo siguiente.

Cuando ya todos estábamos enlazados por la misma cuerda, nos explicó lo que para ella era el teatro, siempre habria un lazo con alguien (compañeros, directo), tan unido a nosotros al actuar que hará que la función salga bien, por fin podia respirar.

Nosotros nos quitamos la cuerda e Inés nos hizo bajar del escenario(yo me iba fijando absolutamente en todo por miedo a que con el tiempo se me borrara algún detalle.. Cuando estábamos en las butacas, nos hizo ir saliendo de uno a uno, nos teniamos que sentar en una silla y explicar quienes eramos, que habiamos estudiado o realizado en teatro alguna vez y que queriamos de este curso, el primero de tres años.

Fueron unos y otros saliendo, todos sin excepción habian estudiado algún curso, los habia que habian estudiado con Gandolfo, otros con fernandez, (dos mitos directores de teatro argentino), yo hasta entonces no tenia ni pajolera idea de quienes eran…y me tocó a mi. Lo primero que pensé es con esta falda desde abajo se me va a ver algo, tenia que haber traido pantalones, de modo que Ines me dijo bueno Violeta cuentanos tus experiencias con el teatro, tu nombre..


Jamás me he subido a un escenario, jamás he estudiado teatro, pero siempre he querido ser como Sara Bernard, he visto teatro y siempre pensaba tu podrias hacerlo, y ha tenido que ser en Buenos Aires donde he visto que un sueño de niña pòdria hacerse realidad..Les hablé de mi miedo de ser mayor frente a tanta gente joven y mis dudas en cuanto a mi acento marcadamente gallego. Que iba a hacer el público entre tanto argentino ver que alguien salia hablando en español.
Inés se encargó de calmarme con su dulce vos diciendome que eso podria ser una ventaja, siempre habria un papel en el que encajarme, y he de decirte que lo consiguió.
Mis compañeros no paraban de reirse oyendome las cosas que decia con mi acentro marcando las eses como decian ellos.

Así fue tracurriendo la primera clase, y con ella el periodo más feliz de mi vida.

Creo que hoy te he escrito una carta muy larga así que seguiremos mañana.



Algo contigo, con la magia que iba sintiendo en cada segundo